Un viaje con lágrimas

Ya casi a menos de 10 km. de llegar a mi centro laboral, me puse a pensar en cómo saldria todo o mejor dicho que resultados tendría la operación de mi madre este jueves - sera operada para eliminar de raiz una deficiencia al oido que trae ya algunos años y por ello la internarán esa misma mañana - y llegue a imaginarme lo peor. De lo trágico que podria ser el terrible desenlace o muerte de mi madre. Por unos minutos me sentí dentro del pellejo de un hijo que pierde a su madre. Aluciné cómo sería una vida con la ausencia de mi madre en estos momentos de mi vida y la verdad que no es nada fácil ni nada tranquilo pasarlo.
La nostalgia me invadió por algunos segundos y dejé que caigan solas algunas lágrimas sobre mi ropa. Cada microsegundo que pasaba era un paso más que daba para darme cuenta del gran valor e importancia que tengo por ella.
Ya mas calmado me puse en pie para bajar en mi paradero.

"El ser humano no debe esperar ninguna tragedia o algun suceso para que recien se dé cuenta del aprecio y del valor que le tiene a una persona o a un ser querido para llamarlo asi. Creo que cada dia o cada momento que pueda ver a esa persona debe de sentir y expresarle el afecto que le tiene, y porque no! decir una palabra bonita o una palabra de aliento a ella.
Es por ello que uno nunca sabe lo que tiene hasta que lo pierde... y efectivamente es asi. Tiene mucho de cierto esa oración."